El bonito pueblo de Junez se encuentra situado en una repisa rocosa por encima del río del mismo nombre.
Unas catorce viviendas conformaban esta aislada población que vivía una economía de subsistencia con lo que producía el
campo (trigo y cebada principalmente) y las cabezas de ganado que poseían (cabras y ovejas).
Siempre fue un barrio de Luna, por lo que dependían de este pueblo para casi todo. De allí venia el cura, el medico, el cartero, a Luna iban los junecinos a moler el grano, a realizar compras y los jóvenes a buscar un poco de diversión (cine y baile).
Aunque el patrón de Junez siempre fue San Lorenzo, pero al pillarles en plena temporada de trabajo en el campo decidieron cambiar las fiestas patronales al 13 de junio (San Antonio). Animados bailes se celebraban en esa ocasión amenizados por los músicos de Luna (guitarra, laúd y acordeón).
La vida era muy dura en Junez debido a que carecían de todo tipo de infraestructuras como era la luz y el agua y una pista de acceso, el médico les quedaba muy retirado. Tenían que ir a por agua para consumo al barranco (200 metros), adonde también tenían que ir las mujeres a lavar, todo esto unido al cierre de la escuela cuando ya quedaban pocas familias, que obligó a los niños a desplazarse a la de Luna fue desanimando a los junecinos que optaron por marchar del pueblo. Luna y Zaragoza fueron los destinos principales de la emigración.
Los hermanos Perez ( Pascual y Candida ) fueron los últimos de Junez, hacia 1973 aproximadamente pusieron punto y final a la presencia humana en el pueblo marchándose a Luna.
Desde entonces el pueblo permaneció vacío aunque algunas gentes seguían acudiendo a trabajar las tierras y es sobre el año 2010 cuando Junez recobra tímidamente la vida con la llegada de dos parejas de neorrurales que se instalaron en el pueblo.
Llegando a Junez.
Entrando a Junez por el viejo camino de Lacasta.
La iglesia parroquial de San Francisco Javier. Atípica edificación casi cuadrangular que rompe un poco los moldes rectangulares con los que suelen estar construidas las iglesias. Pasaría por una vivienda más si no fuera por la pequeña espadaña que la identifica. La pila de agua bendita se trasladó a la iglesia de Santiago de la Corona en Luna.
Escalinata y portada de acceso a la iglesia.
Casa El Rey de Junez. Poderosisima casa solariega convertida a escombros prácticamente. Hasta hace tres años todavía se podía visualizar dos balcones de forja y un precioso adorno labrado bajo uno de ellos con una fecha tallada indicando su año de construcción (1808). Del poder que tenia esta vivienda cuenta la memoria popular que el amo de esta casa podía ir andando desde Junez a Valpalmas, distante a 11 km. sin salirse de sus tierras.
Plaza mayor de Junez.
Casa Marco. Al fondo había un pasadizo bajo cubierto para pasar al otro lado de la calle que se ha venido abajo recientemente.
La última casa que se cerró en Junez (puerta verde).
La escuela de Junez.
Casa Chan Antón. Fue la penúltima vivienda en cerrarse en Junez y una de las dos que actualmente ha tenido una segunda oportunidad de volver a la vida.
Casa Felipe.